Este libro-álbum con texto del prestigioso autor cubano Sergio Andricaín e ilustraciones de Ximena García fue publicado en 2020 por editorial Norma, en su colección Buenas Noches (dedicada a libros para primeros lectores), con la dirección literaria de Laura Leibiker, la coordinación editorial de Laura Linzuain y la edición de Jael Stella Gómez.
Es un libro encantador y divertido, protagonizado por Jorgito, un niño que aparece desde las primeras páginas, aunque no lo vemos, porque está muy bien escondido. Él cuenta que le gusta esconderse para jugar, como travesura, y escuchar cómo lo buscan todos los integrantes de la familia (recién en la página 8, avanzada la historia, comienzan a aparecer la mamá, el papá, el hermano, y nos damos cuenta de que son una familia... ¡de hipopótamos!).
Tan bien se esconde Jorgito, que la familia no puede hallarlo, por más que lo buscan por todas partes de la casa. Y entonces, cuando están por rendirse, él sale de su escondite y recibe, todos juntos, la atención y los mimos de cada uno de la familia, incluso Campana, la mascota. Y esa marea de cariño que recibe cuando sale de sus escondites es lo que hace a Jorgito más feliz. La historia se cierra con una referencia a la lectura compartida entre madres/padres e hijas/os como un acto de amor.
El texto es delicado y preciso, y se lleva a la perfección con las maravillosas ilustraciones de Ximena García, llenas de color y ternura. Los lectores nos quedaremos largo rato observando los detalles de cada escena para responder la pregunta del título, buscando a Jorgito también por todas partes (a veces hay de él apenas un indicio, una parte de los pies, media oreja, una rendija de mirada, de forma que aunque sabemos que debe estar allí, hay que esforzarse para encontrarlo).
En fin: un hermoso libro para leer, releer y disfrutar.
Recomendado.
Muchísimas gracias, Sebastián, por tu reseña. "¿Dónde está el niño?" es un libro en el que quise plasmar algunos recuerdos de mi infancia, que no fue muy original. Me escondía, como suelen hacer todos los niños, para sentirme un miembro esencial y querido de la familia. Al aparecer, me premiaban con besos y abrazos como a Jorgito, como suelen ser abrazados y besados todos los niños por sus familiares. Los niños necesitan amor, todo el amor que podamos darles. Si les entregamos amor a manos rotas, las posibilidades de que crezcan en armonía con el mundo son grandes. Te agradezco enormemente la reseña. Señalas precisamente lo que quisimos lograr la ilustradora Ximena García, las editoras Jael Stella Gómez y Laura Leibiker, la coordinadora…